enero 25, 2025

Ciudad

Escuelas tomadas: los gremios docentes amenazan con amparos

«Se los considerará como ausentes», aseguró, ayer, el ministro de educación porteño, Esteban Bullrich, al referirse a la decisión de los gremios docentes de presentar recursos de amparos para no concurrir a trabajar durante el receso invernal en las escuelas que estuvieron tomadas. Las autoridades porteñas habían anunciado que, en esos colegios, los alumnos recuperarán los días de clase perdidos.

«La agenda educativa necesita de todos los días de clases. Un chico aprende todos los días. Cuando se interrumpe esa agenda, se interrumpe el proceso y hay que recuperarlo. Un chico que fue diez días menos que otro a la escuela no tiene los mismos conocimientos que otro que sí [fue esos días a clase]. En la Argentina, hay una ley que dice que hay 180 días de clases y sería ilegal no cumplirlo. Tenemos que recuperar los días de clase», sostuvo Bullrich durante una entrevista en radio La Red.

Desde la Asociación Docente Ademys-CTA adelantaron que diferentes gremios presentarán un recurso de amparo para que «se cumpla la resolución que establece el receso escolar de invierno como período sin actividad en las escuelas y parte del derecho al descanso de los alumnos y los docentes».

Manuel Gutiérrez, de Ademys, dijo a distintos medios: «Los docentes no fuimos responsables de las tomas» lideradas por la Coordinadora de Estudiantes de Base contra la reforma del sistema de educación media que impulsa el gobierno local. Aún quedan cuatro escuelas tomadas en la ciudad de Buenos Aires: Lola Mora, Escuela de Cerámica N° 1, Manuel Belgrano y Aída Mastrazzi.

Las autoridades educativas porteñas rechazaron los argumentos de los gremialistas. «El receso invernal no es para los docentes. Es un derecho en el estatuto. Ellos tendrían que ir a la escuela a seguir trabajando, preparando las clases -precisó Bullrich-. Yo no puedo poner clases en enero porque corresponde al receso de los docentes. Poner clases en el receso invernal no es contra los docentes.»

Por su parte, Carlos Oroz, secretario gremial de Ademys, consideró: «La toma de escuelas es el resultado de la falta de diálogo con el ministro de educación, que sostiene que con las escuelas tomadas no se sienta a dialogar, pero que sin escuelas tomadas tampoco dialoga ni con estudiantes ni con docentes. Imponer las clases durante las vacaciones de invierno es un castigo a los docentes, que concurrieron a dar su presente en las escuelas. Es un intento de enfrentar docentes y alumnos».

Sobre por qué no se pudieron hacer cesar la toma de los colegios, aun cuando existe una ley que permitiría hacerlo, Bullrich dijo que, como «se votó democráticamente, ningún juez ni fiscal quiere actuar. Lo vamos a respetar. Abrimos otros espacios para que las clases se recuperen».