Los neumáticos aumentaron hasta un 25% tras la devaluación
La devaluación de la moneda argentina de este lunes impactó en los precios de distintos productos y servicios y continúa siendo un tema central.
Las consecuencias de la depreciación se sintieron también en la industria automotriz y en las actividades que giran en torno a ella. Los seis grandes fabricantes de neumáticos que tiene el mercado argentino se cubrieron y a primera hora del lunes enviaron una comunicación a los puntos de venta de todo el país confirmando que la facturación estaba suspendida “hasta tanto se aclare el panorama y se defina una nueva lista de precios”, según explicaron en algunos casos.
Aunque las cubiertas sean de fabricación nacional, el problema radica en que la materia prima es importada, por lo tanto, el aumento del 22% en el valor del dólar se trasladó inmediatamente al costo de los productos.
Fate avisó el lunes que habría una suba de al menos un 20% para sus neumáticos y para las empresas que compran caucho para otras industrias como las cintas transportadoras o los fuelles de transporte de cargas y de pasajeros.
Asimismo, Bridgestone confirmó que sigue abasteciendo a los puntos de venta entregando los pedidos que ya habían recibido, pero sin precio. “El problema lo tenemos nosotros, los que le vendemos a la gente, porque no sabemos qué precio ponerle. Así que lo que hicimos fue aumentar ese 22% y no vender más de cuatro neumáticos por cliente. Es una forma de resguardarnoshasta que haya nueva lista de precios”, señaló el dueño de una cadena de gomerías, para luego comentar también que “algunos colegas me llamaron diciendo que no van a vender hasta que no se clarifiquen los precios porque tienen temor a perder mucho dinero cuando tengan que reponer los neumáticos que vendieron”.
“Nos aumentaron inmediatamente un 22% y no hay crédito. El problema nuestro es que somos empresas chicas trabajando con empresas muy grandes. Le compro a un grande que es un importador de caucho (fabricante de neumáticos), y le vendo a otras empresas grandes como las empresas de transporte. Los proveedores grandes te sacan la financiación y te aumentan el precio. Y los clientes grandes te piden más días para pagarte, pero no ni siquiera te dan los documentos. Te los quieren dar el día de pago. Así se hace muy difícil”, manifestó un empresario que compra materia prima para fabricar productos de goma para camiones y colectivos.